El tratamiento de pacientes que fallan en suicidarse requiere de una gran cantidad de dinero y recursos. Con bajo presupuesto y un argumento sobre el respeto personal, ahora los medicos deben preguntarle al paciente suicida si Ă©l o ella todavĂa quiere vivir o no. Si la respuesta es "no" el gobierno respetarĂĄ su deseo. Sin embargo, el gobierno no simplemente los mata...